VIDA con más detalles
Se conocen los acontecimientos principales de
su vida, pero los biógrafos difieren en cuanto a
algunos detalles y fechas. Normalmente se da
el fin de 1225 como el momento de su nacimiento.
Hay un acuerdo general en que su muerte ocurrió en
1274.
Landolfo, su padre, era Conde de Aquino.
Teodora, su madre, Condesa de Teano. Su familia
estaba emparentada con los Emperadores Enrique VI y
Federico II, y los Reyes de Aragón, Castilla y
Francia. Se cuenta que un santo ermitaño predijo su
carrera, diciéndole a Teodora antes de su
nacimiento: "Entrará en la Orden de los Frailes
Predicadores, y su conocimiento y santidad serán tan
grandes que en vida, no se encontrará nadie que le
iguale". . A los cinco años, según las costumbres de
la época, fue enviado a recibir su primera formación
con los monjes Benedictinos de Monte Casino.
Diligente en sus estudios, desde muy pequeño se
observó su buena disposición para la meditación y la
oración, y su maestro se sorprendió al oírle
preguntar repetidas veces: "¿Que es Dios?"
Alrededor del año 1236, le enviaron a la
Universidad de Nápoles. El traslado se hizo
por iniciativa del Abad de Monte Casino, quien
escribió al padre de Tomás que un chico de su
talento no debería ser dejado en la sombra . En
Nápoles, sus maestros fueron Pietro Martín y Petrus
Hibernos. El cronista dice que pronto superó a
Martín en gramática y fue transferido a Pedro de
Irlanda quién le formó en Lógica y ciencias
Naturales. Las costumbres de la época dividían
Filosofía y Letras en dos cursos: el Trivium, que
cubría Gramática, Lógica y Retórica; el Quadrivium,
que se componía de Música, Matemática, Geometría y
Astronomía... Tomás repetía las lecciones con mayor
profundidad y lucidez que sus maestros.
Decidió abrazar la vida religiosa.
Entre 1240 y 1243 recibió el hábito de la
Orden de Santo Domingo, atraído y dirigido por Juan
de San Julián, un conocido predicador del convento
de Nápoles. La ciudad estaba asombrada al ver a un
noble joven como él tomar el hábito de un pobre
fraile. Su madre, con sentimientos de alegría y
tristeza a la vez, se apresuró a ir a Nápoles a ver
a su hijo. Los Dominicos, temiendo que se lo
llevaran, le enviaron a Roma, aunque su destino
final sería París o Colonia. Teodora convenció a los
hermanos de Tomás, que eran soldados del Emperador
Federico, capturaron al novicio cerca del pueblo de
Aquependente y le recluyeron en la fortaleza de San
Juan de Rocca Secca. Allí estuvo detenido casi dos
años, mientras sus padres, hermanos y hermanas
hacían todo lo posible para destruir su vocación.
El tiempo en cautiverio no fue perdido. Su
madre empezó a ceder tras los primeros impulsos de
ira y tristeza; se les permitió a los Dominicos
proporcionarle nuevos hábitos, y con la ayuda de su
hermana obtuvo algunos libros –las Sagradas
Escrituras, la Metafísica de Aristóteles y las
"Sentencias" de Pedro Lombardo. Tras año y medio o
dos en prisión, sea porque su madre se dio cuenta de
que la profecía del ermitaño se cumpliría o bien
porque sus hermanos temían las amenazas de Inocencio
IV y Federico II, fue puesto en libertad bajándolo
en un cesto a los brazos de los Dominicos que se
admiraron al darse cuenta de que durante su
cautiverio "había progresado tanto como si hubiera
estado en una Universidad"
Tomás enseguida hizo sus votos, y sus
superiores le mandaron a Roma. Inocencio IV examinó
con atención los motivos que le llevaron a entrar en
la Orden de Predicadores, le despidió con una
bendición y prohibió cualquier interferencia en su
vocación. Juan el Teutón, cuarto Maestro General de
la Orden, llevó al joven estudiante a París y según
la mayoría de los biógrafos del santo, a Colonia, en
1244 o 1245, a cargo de Alberto Magno, el más famoso
profesor de la Orden. En las escuelas, el carácter
humilde y taciturno de Tomás fue mal interpretado
como indicios de retraso mental, pero cuando Alberto
escuchó su brillante defensa de una difícil tesis,
exclamó: "Llamamos a este joven un buey mudo, pero
su mugido doctrinal un día resonará hasta los
confines del mundo."
En 1245 enviaron a Alberto a París y Tomás le
acompañó como alumno. En 1248 ambos volvieron a
Colonia. Alberto había sido nombrado regente del
nuevo Studium generale, erigido aquel año por el
Capítulo General de la Orden y Tomás debía enseñar
bajo su autoridad como Bachiller. Durante su
estancia en Colonia, probablemente en 1250, fue
ordenado sacerdote por Conrado de Hochstaden,
arzobispo de esa ciudad. Durante toda su vida, con
frecuencia predicó la Palabra de Dios en Alemania,
Francia e Italia. Sus sermones se caracterizaban por
su fuerza, piedad, solidez en la enseñanza y
abundantes referencias bíblicas. En 1251 o 1252, el
Maestro General de la Orden, aconsejado por Alberto
Magno y Hugo de San Caro, nombró a Tomás Bachiller
(subregente) del Studium Dominico en París. Este
nombramiento puede considerarse como el principio de
su vida pública, ya que su enseñanza rápidamente
llamó la atención tanto de profesores como de
alumnos. Sus deberes consistían principalmente en
explicar las "Sentencias" de Pedro Lombardo, y sus
comentarios sobre ese texto teológico le
proporcionaron el material y en gran parte, en
esquema general para su obra magna, la "Summa
Theologica". En el transcurso del tiempo, se le
ordenó prepararse para el Doctorado de Teología por
la Universidad de París, pero aplazaron la concesión
del título por una disputa entre la universidad y
los frailes. El conflicto, en su origen una disputa
entre la universidad y las autoridades civiles,
surgió tras un incidente con la guardia de la ciudad
que resultó en un estudiante muerto y otros tres
heridos. La universidad, celosa de su autonomía,
exigía una satisfacción que le fue negada. Los
doctores cerraron sus facultades, juraron
solemnemente que no las abrirían hasta ver
satisfechas sus demandas y decretaron que en el
futuro a nadie se le conferiría el título de doctor
a menos que jurase seguir la misma línea de conducta
en circunstancias similares. Los Dominicos y
Franciscanos, que habían seguido enseñando en sus
escuelas se negaron a hacer el juramento exigido, y
de aquí surgió un amargo conflicto que estaba en su
punto álgido cuando Santo Tomás y San Buenaventura
estaban preparados para recibir sus doctorados.
Guillermo de San Amour extendió la disputa más allá
del tema original, atacó violentamente a los
Frailes, de los que estaba evidentemente celoso, y
les negó su derecho a ocupar cátedras en la
universidad. Contra su libro "De periculis
novissimorum temporum" (Los peligros de los Últimos
Tiempos) Santo Tomás escribió el tratado "Contra
impugnantes religionem"(Contra los que atacan a la
religión), una defensa de las órdenes religiosas .
El libro de Guillermo de San Amour fue condenado por
Alejandro IV en Anagni, el 5 de octubre de 1256 y el
Papa ordenó que los frailes mendicantes fueran
admitidos al doctorado.
Santo Tomás recibió su doctorado en teología.
La fecha que dan la mayoría de sus biógrafos es la
del 23 de octubre de 1257.
Desde entonces, la vida de Tomás puede
resumirse en pocas palabras, orar, predicar,
enseñar, escribir, viajar. La gente deseaba más
escucharle a él que a Alberto, a quien Santo Tomás
superaba no sólo en precisión, lucidez, concisión y
fuerza de expresión, sino también en universalidad
de conocimientos. París le reclamaba como suyo; los
Papas deseaban tenerle junto a ellos; los studia de
la Orden ansiaban disfrutar de los beneficios de su
enseñanza; así, le encontramos sucesivamente en
Anagni, Roma, Bolonia, Orvieto, Viterbo, Perugia y
París de nuevo y finalmente en Nápoles, siempre
enseñando y escribiendo, viviendo en la tierra con
una pasión, un celo ardiente por exponer y defender
la verdad Cristiana. Tan dedicado estaba a su misión
que con lágrimas pedía que no le obligaran a aceptar
la titularidad del Arzobispado de Nápoles, que le
fue conferido por Clemente IV en 1265. Si hubiese
aceptado este nombramiento, muy probablemente nunca
hubiera escrito la "Summa Theologica.".
Cediendo a las peticiones de sus hermanos, en
varias ocasiones participó en las deliberaciones de
los Capítulos Generales de la Orden. Uno de dichos
capítulos tuvo lugar en Londres en 1263. En otro,
celebrado en Valenciennes (1259) colaboró con
Alberto Magno y Pedro de Tarentasia (que sería el
Papa Inocencio V) a formular un sistema de estudios
que substancialmente permanece hasta hoy en los
studia generalia de la Orden Dominicana.
El Papa Gregorio X, habiendo convocado un
concilio general a celebrar en Lyon el primero de
mayo de 1274, invitó a Santo Tomás y San
Buenaventura a participar en las deliberaciones,
ordenó al primero traer al concilio su tratado
"Contra errores Graecorum" (Contra los Errores de
los Griegos). Intentó obedecer y salió a pie en
enero de 1274, pero le fallaron las fuerzas; cayó
desplomado cerca de Terracina, desde donde le
llevaron al Castillo de Maienza, hogar de su sobrina
la Condesa Francesca Ceccano. Los monjes
cistercienses de Fossa Nuova, insistieron para que
se alojara con ellos, y así fue trasladado a su
monasterio, y al entrar, le susurró a su compañero:
"Este es para siempre el lugar de mi reposo".
Murió el 7 de marzo de 1274.
Adaptación de un texto de
The Catholic Encyclopedia, Volume I
Copyright © 1907 by Robert Appleton Company
Online Edition Copyright © 1999 by Kevin Knight
Enciclopedia Católica Copyright © ACI-PRENSA
http://www.enciclopediacatolica.com/