La materia

"Y entiendo por materia la que de suyo ni es algo ni es cantidad ni ninguna otra cosa de las que determinan al ente, pues es algo de lo que se predica cada una de estas cosas, y cuyo ser es diverso de cada una de las categorías (pues todas las demás cosas se predican de la substancia, y ésta, de la materia); de suerte que lo último no es, de suyo, ni algo ni cuanto ni ninguna otra cosa; ni tampoco sus negaciones, pues también estas serán accidentales. Así, pues, quienes procedan de este modo llegarán a la conclusión de que es substancia la materia.

Pero esto es imposible. En efecto, el ser separable y algo determinado parece corresponder sobre todo a la substancia; y, por eso, la especie y el compuesto de ambas parecen ser substancias en mayor grado que la materia. Pero omitamos la substancia compuesta de ambas, es decir, la que se compone de materia y forma, pues es posterior y clara. Y también es manifiesta en cierto modo la materia. Debemos investigar, en cambio, acerca de la tercera, pues ésta es la más difícil."


Aristóteles, Metafísica VII, 4


La materia como principio de individuación

Así pues, está claro por lo dicho que lo que se enuncia como especie o substancia no se genera, pero sí se genera el conjunto total que recibe el nombre de aquélla, y que en todo lo que es generado hay materia.
[...]
De suerte que está claro que para nada se necesita suponer una especie como modelo ( pues se requerirían sobre todo en estas cosas, ya que estas son substancias en grado sumo), sino basta que lo generante actúe y sea causa de la especie en la materia. Y el todo, finalmente, tal especie en estas carnes y estos huesos, es Calias y Sócrates. Y se distinguen por la materia ( que es distinta ), pero son lo mismo por la especie (pues la especie es indivisible).


Aristóteles, Metafísica VII, 9