Hippodamos fue el que llevó a cabo esta tarea, oriundo de Mileto (00 a.c.)
creando un trazado urbano totalmente novedoso.
Aristóteles nos habla de él como el primer teórico y práctico de una
lógica distribución de la ciudad y lo consideraba el primer urbanista
con criterio científico y riguroso.
La ciudad griega se estructuraba en torno al Agora o plaza publica que
era el verdadero hervidero social. En dicha plaza se situaba el mercado
que luego pasó a ser el centro político de la ciudad. En esto se asemeja
a cualquier otra ciudad del mundo islámico, medieval etc... Pero Hippodamos
ideó la creación de la ciudad en cuadrícula cuyos antecentes se remontaban
a civilizaciones Indostánica, Egipcias y Mesopotámicas.
Pero, ¿En qué consistia el nuevo trazado? Hippodamos aplicó el criterio
de calles rectas que se cortan en ángulos de noventa grados. Este trazado
se aplicó, sobre todo, a ciudades ex novo o de nueva planta, particularmente
en las colonias. Este plan urbanístico, tomó el nombre de su creador:
trazado hipodámico.
La historiografía nos dice que Pericles tenía entre sus amigos a este
arquitecto, además parece ser que contó con un gran prestigio y gran
crédito, aunque también sirvió como motivo de burla para literatos como
fue Aristófanes, que lo critica duramente en su obra Los Pájaros.
De las ciudades creadas por este arquitecto, geómetra, artista y filósofo,
apenas nos quedan restos, pues ciudades como Pireo y Rodas, eregidas
con el nuevo trazado, fueron transformadas en profundidad.Sin embargo
contamos con otras ciudades, que se inspiraron en este trazado, como
es su ciudad natal: Mileto.
En el 494 a.C., un ataque persa obligó a la reedificación de la ciudad,
que se hizo bajo un trazado ortogonal cuyas bases eran hippodámicas.
Mileto se dividió en dos zonas en cuadrícula, y en el centro, como punto
de unión entre ambas partes, se instaló el ágora, y el famoso mercado.
Las calles principales seguían una dirección Norte-Sur, y se cruzaban
por otras calles secundarias de Este-oeste. Esto originaba una serie
de cuadrantes que permitían la instalación de la casa griega, resuelta
en torno a un patio orientado a la fachada sur, que gozaba de los beneficios
del sol, penetrando en invierno hasta el fondo de la habitación principal,
normalmente porticada; y en verano protegía la casa del calor con el
pórtico.
De todos modos, los filósofos y urbanistas griegos, no se ocuparon sólo
en buscar una organización racionalista del urbanismo, sino que buscaron,
a través de la teoría un modelo ideal de ciudad.
Mónica Diez de la Cortina